dilluns, 23 d’abril del 2012

Dia Pennac 2

Después de haber realizado el examen teórico de "Mal de Escuela" de Daniel Pennac, por grupos teniamos que hacer un trabajo práctico sobre alguno de los temas que más nos haya impactado del libro. Mi grupo, formado por Pere, Andreu, Neus, Jesus y yo elegimos el tema relacionado con el "Basurero de Djibuti", que después de este fragmento del libro explicaré:

"Bernard, por su lado, ofrecía su explicación: a? —Sí. Era un vertedero al aire libre, de hecho. Caíste desde lo alto de una pared. No recuerdo ya cuánto tiempo maceraste allí. Habías desaparecido, te buscaban por todas partes y tú te debatías allí dentro, bajo un sol que debía de acercarse a los sesenta grados. Prefiero no imaginar cómo debió de ser aquello.
La imagen del basurero, a fin de cuentas, se adecua bastante a esa sensación de desecho que experimenta el alumno que está perdido para la escuela. «Basurero» es, por lo demás, una palabra que he oído pronunciar varias veces para calificar esos antros privados, no concertados, que aceptan (¿y a qué precio?) recoger los desechos escolares. Viví allí de los doce a los dieciséis años, interno. Y de entre todos los profesores que tuve que soportar, cuatro me salvaron."

El tema que nos intereso para realizar el trabajo fué la importancia que tuvo para Pennac los cuatro profesores que le salvaron en sus peores momentos, cuando se encontraba "perdido en la escuela".

Por tanto, cada uno de nosotros intentó contar una historia a la clase sobre alguna experiencia que habia vivido relacionada con este tema, es decir, alguna persona, en este caso un educador (profesor,  entrenador,...) que había ayudado a otra a salir de algua situación complicada. La mia, estaba dedicada a un entrenador que tuve, que aunque después de mucho tiempo de estar lesionado y sin a entrenar, se preocupó por mi (sin tener obligación de hacerlo) en los momentos mas difíciles, cuando tenía continuas recaidas, pruebas, y más cosas relacionadas con la lesión... Y me ayudó mucho a salir de ese bache que tuve.

Mis otros compañeros también contaron otras historias, pero todos tuvimos un mismo fallo (habiéndolo hablado después con Víctor): nos centramos demasiado en la historia que nos habia ocurrido y poco en el tema verdaderamente importante, lo que nos habia significado para nosotros el libro de "Mal de Escuela", y más concretamente el tema que habiamos escogido.

dissabte, 14 d’abril del 2012

Mal de escuela

Hace ya unas semanas que hicimos el examen sobre el libro de lectura de "Mal de Escuela", de Daniel Pennac. A continuación voy a hacer un breve comentario sobre que me ha parecido el libro.

Personalmente, yo siempre he pensado que el hecho de ser profesor, o dedicarse a cualquier tipo de eseñanza, debe ser vocacional, es decir, que tienen pasión y les gusta aquello que hacen. Eso es lo que de alguna manera reivindica el autor, Daniel Pennac, que hay que saber tratar a todos los alumnos, por muy diferentes que sean. Habrá algunos que te lo pongan más fácil, y otros, los "zoquetes", que te costará un poco más, pero no por ello tienes que ser menos con ellos.



También me parece muy interesante la visión que hace del zoquete. Esa persona que esta atrapado en su mundo, que no tiene confianza en si mismo y que todo eso propicia que no entienda nada. Independientemente de que tenga cualidades o no para hacerlo.

A parte de estos temas, tengo que decir que el libro no me ha entusiasmado mucho. Su manera de contar la historia, cambiando constantemente su situación de alumno y profesor a veces me confundia. Pienso que muchas veces incidia o daba demasiada impotancia a hechos que para mi eran irrelevantes.

Por tanto, por una parte puedo recomendar el libro por las cosas de las que te das cuenta en el mundo del profesorado (a todos aquellos que tengan una vocación educativa), pero nunca lo haria por su narrativa, ya que la considero aburrida y repetitiva.